Almuerzo navideño en comedores populares para los más necesitados

En Navidad, las familias se reúnen alrededor de una mesa festiva y abundante. Sin embargo, son muchas las personas que no tienen ni siquiera lo básico para comer y no tienen con quién compartir la alegría de la Navidad.

Para que puedan sentir al menos un poco del ambiente navideño, se ocupan de ello organizaciones y entidades humanitarias, entre ellas los comedores populares de todo el país y numerosos voluntarios.

Los franciscanos de Zagreb en Sveti Duh llevan décadas manteniendo esa forma de ayudar a quienes lo necesitan.

El responsable del comedor popular, el padre Vilček Novački, comentó que la comida de hoy será a las 3 de la tarde y se ha preparado cerdo asado, ensalada rusa, además de postre y vino caliente.

“En los días festivos aumenta el número de usuarios, y cada día cocinamos comida para unas 500 personas” - destacó.

La voluntaria Jelena Markanović señaló que hay muchos voluntarios que se turnan a diario.

El padre Vilček dijo que hoy se han preparado 700 comidas.

Al preguntarle quiénes son las personas que acuden al comedor popular, el padre Vilček respondió que se trata de historias tristes.

“Las personas que vienen a menudo solo buscan alguien con quien hablar. No todo es cuestión material. Sentir que no están solos significa más para ellos que el plato caliente que reciben” -subrayó.

Markanović comentó que a veces los usuarios están muy cansados y simplemente se van, pero otras veces, a pesar de no tener nada, se muestran alegres y agradecidos por la oportunidad de recibir una comida caliente.

En Navidad, las familias se reúnen alrededor de una mesa festiva abundante. Sin embargo, muchas personas no tienen ni siquiera lo básico para comer y no tienen con quién compartir la alegría de la Navidad.

Destacó que los voluntarios son personas que ofrecen su pequeña ayuda a los demás, lo que llena el corazón.

“Hay muchos jóvenes voluntarios, que están dispuestos a ayudar a los necesitados” - subrayó.

El padre Vilček comentó que el mundo de hoy se ha vuelto egoísta, pero que la Iglesia quiere cambiar esa perspectiva porque debemos pensar los unos en los otros, ya que todos somos prójimos, y hay muchos prójimos que necesitan ayuda.

“Todos podemos dar desde el amor, y entonces esa entrega es alegre y nos llena tanto a nosotros como a los usuarios que lo necesitan” - destacó.

Añade que una sonrisa no cuesta nada, y recibimos mucho a cambio.

El padre Vilček explicó que en los últimos ocho años, el número de comidas servidas en el comedor popular ha pasado de 250 a 500 y considera que esa cifra seguirá aumentando.

“Gracias a las personas generosas que donan cada día, tenemos los recursos necesarios” – destacó el padre Vilček.