En Croacia, más del 17 por ciento de los ciudadanos vive con algún tipo de discapacidad, pero las barreras que enfrentan a diario siguen siendo numerosas. Así lo advirtió el Defensor de las Personas con Discapacidad, Darijo Jurišić, con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se celebra cada 3 de diciembre.
Jurišić señaló que este año recibieron muchas quejas por los largos trámites para obtener el complemento de inclusión y por el bajo monto de las prestaciones. También aumentan las denuncias de padres de niños con dificultades del desarrollo, quienes aseguran que muchos jardines de infancia no les conceden plaza o reducen su tiempo de estancia, limitando su acceso a la educación temprana.
Uno de los problemas más graves sigue siendo el transporte escolar: en muchas zonas depende exclusivamente de los padres, aunque debería ser garantizado por las autoridades locales y el Ministerio de Educación.
El defensor también alertó sobre los riesgos del alojamiento institucional, donde la falta de privacidad, autonomía y contacto con la comunidad puede derivar en abandono o violencia. Durante los eventos de Adviento, agregó, muchas ciudades aún presentan espacios inaccesibles y falta de información adaptada.
Jurišić insistió en que la inclusión debe estar presente en todas las políticas públicas, desde la educación y el empleo, hasta la movilidad y la tecnología.
Recordó además que, según Naciones Unidas y la Agencia Europea de Derechos Fundamentales, las personas con discapacidad siguen siendo más vulnerables a la pobreza, la discriminación y el abuso, especialmente quienes viven en instituciones.