El Legado de Dražen Petrović

Gustavo Glavinich Luraschi, paraguayo de origen croata, fundó en Asunción del Paraguay un equipo de básquetbol inspirado en Dražen Petrović.

- Mi nombre es Gustavo Glavinich Luraschi, vivo en Asunción del Paraguay y soy descendiente de croata. Mis padres se llaman Gustavo y Laura y mi hermana que reside en Split se llama Mariana.

Mi padre siempre nos inculcó el amor por Croacia. Ya desde el Campeonato Mundial de Fútbol en Francia en 1998 gritábamos los goles de Davor Šuker por toda la casa - destaca el basquebolista paraguayo.

Desde su infancia Gustavo Glavinich es amante del básquetbol.

- Lo jugué siempre. Hace más de una década conocí la historia de Dražen Petrović, el mejor deportista croata de todos los tiempos, y me conmovió su pasión.

El año pasado tras estar unos meses estudiando el idioma croata en Zagreb, inspirado en Dražen, decidí regresar a mi país y someterme a una cirugía de tobillo en la que me reconstruyeron tres ligamentos.

A principios de este año fundé un equipo de básquetbol amateur para volver a jugar con mis amigos y les pedí que lo llamemos "Cibona" en honor a Dražen Petrović - enfatiza el paraguayo de raíces croatas. 

El equipo conmemoró el trigésimo aniversario de la muerte de Dražen Petrović.

 - Desde febrero estamos compitiendo en dos torneos amateurs vistiendo uniformes con el apellido de Petrović en la espalda y organizando una serie de actividades para conmemorarlo a 30 años de su pérdida física. El 7 de junio realizamos nuestro primer evento, lo denominamos Cibona Cinema: El Legado de Dražen Petrović.

Se trató de una función de cine dirigida principalmente a los integrantes del equipo y allegados en la que proyectamos un documental sobre su vida. Unas 50 personas asistieron a la cita en una noche muy emotiva dedicada al Mozart del baloncesto.

Estamos dando nuestros primeros pasos, pero desde el "Cibona" de Paraguay queremos seguir creciendo y difundiendo el legado de pasión y grandeza de Dražen Petrović que nos inspira a trabajar por el deporte - concluye el basquebolista paraguayo Gustavo Glavinich Luraschi.